España ha perdido 30.700 autónomos
En el último año, España ha perdido 30.700 autónomos (-1,5%) aunque hay 502.100 asalariados más (+3,3%)
Hace unos días The Adecco Group, líder mundial en la gestión de recursos humanos, en colaboración con los investigadores de Barceló y Asociados, presentó la primera parte del V Monitor Anual Adecco de Ocupación: un detallado análisis de la evolución del empleo según la ocupación en España.
En esa primera entrega se analizó el perfil demográfico del nuevo ocupado español: varón, andaluz, mayor de 25 años y con formación superior. Aunque también se pudo observar que el empleo juvenil crecía a dos dígitos o que la ocupación de inmigrantes estaba creciendo a mayor ritmo que la de personas de nacionalidad española.
En esta segunda entrega del V Monitor Anual Adecco de Ocupación, se analizará el perfil socioeconómico de los nuevos ocupados españoles: qué sectores han acaparado la creación de más puestos de trabajo y qué tipo de empleo se ha creado (por cuenta ajena o propia) y si la contratación está siendo temporal o indefinida.
Como ya se vio hace unos días, el número de ocupados en España alcanza actualmente los 19 millones, el número más alto en ocho años. En el último año (en referencia a los últimos doce meses, desde el tercer trimestre de 2017 al tercer trimestre de 2016), el número de ocupados en nuestro país ha aumentado en 521.700 personas, lo que supone un incremento interanual de un 2,8%. Con éste, suman 14 los trimestres consecutivos con crecimiento interanual del empleo, hecho que no se registraba desde junio de 2008. Además, el empleo ha crecido en 13 de las 17 comunidades autónomas españolas. Así se ha distribuido la creación de empleo en nuestro país, según las variables estudiadas.
Empleo según la situación profesional: caen los autónomos
Si separamos los empleos en dos grandes categorías, asalariados y no asalariados, vemos que la práctica totalidad de los puestos de trabajo creados en los últimos doce meses en nuestro país corresponde a la primera. En efecto, el número de asalariados ha tenido un incremento interanual de 502.100 personas (+3,3%), al mismo tiempo que el de no asalariados ha aumentado en 19.300 (+0,6%).
Sin embargo, dentro de cada una de las categorías hay diferencias. Por ejemplo, entre los no asalariados solo ha aumentado el número de empleadores, con un alza interanual de 51.500 personas (+5,6%). Al mismo tiempo, se ha reducido el número de autónomos (-30.700 personas, -1,5%) y el de Otros (donde se incluyen principalmente miembros de cooperativas y personas que ayudan en el negocio familiar sin remuneración), que se ha reducido en 1.500 personas (-1,2%).
Entre los asalariados, 9 de cada 10 nuevos empleos se han originado en el sector privado, que ha aumentado la contratación en 443.900 personas (+3,6% interanual). En el sector público el número de asalariados ha crecido en 58.200 personas (+1,9%).
Así, desde el punto de vista de la situación profesional, tenemos que los 19 millones de ocupados españoles se corresponden con 15,9 millones de asalariados y 3,1 millones de no asalariados. A su vez, los trabajadores por cuenta ajena se dividen en 12,8 millones de asalariados en el sector privado y 3,1 millones en el público. Por su parte, los no asalariados pueden desagregarse en 2 millones de autónomos, 969.700 empleadores y 119.800 personas en otras situaciones.
Comparativa 2017-2008
El peso del empleo asalariado dentro de la ocupación total es ahora de un 83,5%, la proporción más alta desde diciembre de 2011 y mayor que el 82,3% que había en 2008 (antes del estallido de la crisis). La importancia del empleo público viene descendiendo desde comienzos del año 2012, cuando representaba un 21,7% frente al 19,3% actual. Sin embargo, aún es una proporción elevada en comparación con el 18% del año 2008.
El segmento de no asalariados supone un 16,5% del empleo total, 1,2 puntos porcentuales menos que en 2008. Sin embargo, desde entonces los autónomos han incrementado su peso en el empleo total en 0,3 puntos porcentuales, hasta el 10,7%. Opuesto ha sido el caso de los empleadores, que ahora dan cuenta del 5,1% del empleo total (7 décimas menos que en 2008) y el de las personas con otras situaciones profesionales (han reducido su participación en 8 décimas, hasta el 0,6%).
La situación profesional por autonomías
Empleo asalariado fijo y temporal
Otro ángulo desde el que se puede analizar la evolución del empleo asalariado es según sea la duración de su contrato: indefinida o temporal.
Cerca de un 60% de los empleos asalariados creados en los últimos doce meses ha sido de carácter indefinido: la contratación de 502.100 asalariados se desagrega en la incorporación de 299.300 personas con un contrato indefinido (+2,7%) y otras 202.800 con uno temporal (+4,9%).
Los 15,9 millones de asalariados que hay en España en la actualidad se dividen en 11,6 millones de asalariados con contrato indefinido y 4,3 millones con contratación temporal.
El mayor aumento de los contratos temporales hace que la tasa de temporalidad (proporción de asalariados temporales dentro del colectivo de asalariados) se haya incrementado hasta el 27,4%, 0,4 puntos porcentuales más que un año atrás. Sin embargo, es una proporción inferior a la que había al inicio de la crisis de 2008, de un 29,3%.
La ocupación indefinida y temporal por autonomías
En once autonomías se ha repetido lo registrado a nivel nacional, es decir, un alza simultánea de la contratación indefinida y de la temporal. En seis de ellas, el número de los temporales ha crecido a más velocidad que los indefinidos.
La mayor disparidad se encuentra en la Comunidad Valenciana (-0,6% interanual los indefinidos y +16,7% los temporales) y en Extremadura (-8,2% los fijos y +7,8% los de duración determinada), que son las únicas que presentan una caída en el número de asalariados con contrato indefinido al mismo tiempo que ha aumentado el de temporales. Andalucía, Canarias, Castilla y León, Cataluña y La Rioja son las únicas en las que el número de asalariados fijos ha crecido más que el de temporales.
Se cuentan cuatro regiones en las que ha crecido el colectivo de asalariados indefinidos al mismo tiempo que se ha reducido el de temporales. Son Asturias (+1,8% y -0,5%, respectivamente), Castilla-La Mancha (+5,3% y -0,2%), Navarra (+5,1% y -3,3%) y el País Vasco (+0,3% y -1,7%).
Extremadura (39%), Murcia (35,6%) y Andalucía (35,3%) son las únicas regiones en las que más de un tercio del total de asalariados trabaja con contratos temporales.
En el extremo opuesto está Madrid, con un 19,4%, siendo la única en donde esta variable es inferior al 20%. Le siguen Cataluña (22,2%) y Navarra (23,4%).
Salvo excepciones, ahora la temporalidad es menor que antes de la crisis. Solo son tres las autonomías en las que la tasa de temporalidad ahora es mayor que en 2008: Extremadura (ha pasado de un 38,9% a un 39%), Baleares (de un 31% a un 31,9%) y La Rioja (de un 23,5% a un 24,7%).
Empleo por sector económico
Si clasificamos el empleo en 11 ramas de actividad (Agricultura, Agua y Energía, Manufacturas, Construcción y siete ramas de Servicios), vemos que tres de ellas concentran casi 2 de cada 3 empleos en el conjunto de España. Ellas son Comercio y Hostelería (30,1% del empleo total), Administraciones Públicas y servicios sociales (21,5%) y Manufacturas (12,7%). Estas mismas tres ramas de actividad son las que más empleos proveen en once comunidades autónomas, aunque no en todas ellas con la misma importancia relativa.
Canarias y Baleares se diferencian del resto por la mayor importancia de la rama de Comercio y Hostelería, que da cuenta, respectivamente, del 46,7% y del 45% de todos los puestos de trabajo. Al mismo tiempo, son las regiones donde el empleo de las Manufacturas tiene un peso más bajo (5,4% en Baleares y 2,9% en Canarias).
La situación inversa está representada por Navarra y La Rioja que son las autonomías donde el empleo de las Manufacturas alcanza su mayor importancia relativa (25,7% y 22,3%, respectivamente) y la del Comercio y Hostelería una relevancia relativamente baja (un 22,2% en Navarra, la menor marca a nivel autonómico, y un 27,5% en La Rioja, la sexta menor).
Las Actividades profesionales alcanzan un mayor desarrollo en Madrid y Cataluña, con un 14,5% y un 10,8% del empleo total, respectivamente.
Extremadura (27,7%) y Castilla y León (24,5%) son las regiones en las que el empleo de AA.PP. y servicios sociales ocupa un espacio mayor.
Murcia (14,1%) y Extremadura (12,9%) son los únicos casos en los que el empleo de la Agricultura, Ganadería y Pesca supera el 10% del total.
En el conjunto de España, las once ramas de actividad han incrementado su ocupación a lo largo de los últimos doce meses, situación que, paradójicamente, no se reproduce en ninguna autonomía. Información y comunicaciones (+12,4%) y Actividades inmobiliarias (+10% interanual) exhiben las variaciones más amplias. Sin embargo, el mayor número de nuevos empleos ha correspondido a Manufacturas (119.000; +5,2%).
En todas las ramas de actividad hay comunidades autónomas en las que el empleo ha crecido y otras en donde se ha reducido. El empleo en Agricultura y ganadería ha aumentado en 14 regiones (todas menos Castilla y León, Madrid y La Rioja), mientras que lo mismo ha ocurrido en la rama de Información y comunicaciones (crece en todas excepto Aragón, Castilla-La Mancha y La Rioja). Pese al significativo aumento de su empleo en el conjunto de España, la ocupación en las Actividades Inmobiliarias ha disminuido en nueve autonomías, algo que también sucede con el empleo de Finanzas y seguros y de AA.PP. y servicios sociales.
Madrid y Castilla-La Mancha son las autonomías en las que el incremento del empleo ha tenido un origen más diverso. En efecto, estas dos regiones presentan aumentos interanuales en la ocupación en 9 de las 11 ramas de actividad. También ha tenido un origen relativamente diverso el aumento del empleo en Asturias, Baleares, Cataluña, la Comunidad Valenciana y Galicia, con 8 ramas mostrando incrementos. En Aragón y en La Rioja, aunque el empleo total ha aumentado, apenas ha crecido la ocupación en 4 ramas.
Comparativa 2017 - 2008
Comparando el número de ocupados último de cada rama de actividad con el del mismo mes de 2008, se advierte que hay cinco con un incremento del empleo a lo largo de esos ocho años.
La diferente evolución en el empleo ha significado un cambio en la composición de la ocupación por ramas de actividad.
Aunque más moderado, también ha tenido un aumento de su peso en el empleo entre 2008 y 2017 la rama de Servicios culturales (0,6 p.p.). Las demás ramas de actividad (Finanzas y seguros, Información y comunicaciones, Actividades inmobiliarias, Agricultura, ganadería y pesca, y Agua y energía) exhiben ahora prácticamente la misma participación que nueve años atrás.
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